lunes, 13 de febrero de 2017

Guillermo Ochoa y Adrián Ramos, ¿futuro en rojiblanco?


Ambos no cierran la puerta a seguir en el Granada, aunque cada uno tiene unas circunstancias diferentes

RAFAEL LAMELAS | GRANADA
@rafaellamelasjr

13 febrero 2017
14:01

El futuro de dos futbolistas del Granada está abierto. Dos jugadores que son importantes en su actual estructura. Uno está plenamente consolidado y el otro ha llegado en el mercado de invierno con una importante vitola. Se trata de Guillermo 'Memo' Ochoa, portero mexicano, y el delantero colombiano Adrián Ramos.

El arquero azteca ya deja claro, en la entrevista publicada este fin de semana en IDEAL, que todavía no tiene decidido qué pasará con él la temporada que viene. En verano concluye contrato con el Málaga, que le tiene cedido por este curso en Granada, y será libre de optar por algunas de las opciones que se le presentan sobre la mesa. Parece evidente que el club nazarí intentará retenerle, pero otra cosa son las posibles ofertas económicas que se le presenten a Ochoa, que tiene además una ficha alta que esta temporada sufraga en su mayor parte el propio Málaga.

El escenario con Adrián Ramos es distinto. El cafetero está en el equipo rojiblanco bajo una fórmula curiosa. Lo cede el Borussia Dortmund hasta el 30 de junio, fecha tope para que el Chongqing Lifan, el equipo chino del presidente John Jiang, ejecute una opción de compra que se baraja en torno a los 12 millones de euros. Sin embargo, en caso de permanencia del Granada, 'Adriancho' podría extender su vínculo en España como poco hasta diciembre, si bien en una entrevista concedida a Marca deja caer que esta estancia podría incluso ser mayor en el caso de estar feliz, con el equipo de nuevo en Primera división.

Es muy pronto para definir el futuro, pero el Granada más tarde o más temprano tendrá que empezar a moverse. Lo fundamental es el objetivo de salvación para saber dónde construye el próximo proyecto, pero de reojo ha de mirar a estos frentes. También a los de los 'Pozzitos': aquellos futbolistas pertenecientes al fondo de inversión del empresario italiano, antiguo propietario del Granada, que están haciendo una buena campaña y que sería ideal que siguieran. Gente como Uche, Aly Mallé e incluso Hongla y Sulayman, con los que la dirección deportiva tendrá que estudiar una tentativa para retenerlos, ya sea con un traspaso o un nuevo préstamo.

"Yo he aprendido de la experiencia y trato de transmitir esa calma"

Repasamos la entrevista publicada este domingo en la edición impresa de IDEAL con Guillermo 'Memo' Ochoa

RAFAEL LAMELAS | GRANADA

13 febrero 2017
07:45

Guillermo Ochoa, el portero mexicano del Granada, mostró sus impresiones acerca de su trayectoria en el equipo rojiblanco en las páginas de IDEAL. Ochoa trasladó lo sucedido en el partido ante Las Palmas, los difíciles comienzos y su confianza en revertir la situación generada. Hoy se pone los guantes para intentar vencer en Ipurúa.

-Tiene una colección de paradas antológicas esta temporada.

-La situación hace que lo individual no sobresalga tanto, ha sido complicada desde el inicio. Estoy contento de que haya cosas que salgan bien y que en lo personal pueda colaborar para que el equipo saque buenos resultados. Intento estar preparado.

-Vuelva al partido y analice la acción que le detiene a Jesé y que fue tan decisiva.

-Es un jugador muy hábil, rápido. Fue un momento en el que uno no piensa. Te lo da el trabajo, la repetición de movimientos hasta que llega el momento del partido y lo haces. Mantener ese temple y estar ahí en el momento indicado. Lo aguanté y por fortuna saqué la mano para mantener el cero. Ese es el número del portero, el mejor resultado. Siempre que hay un cero en la propia portería, más opciones tenemos de ganar. Con Las Palmas tenía que ser así. El Granada estuvo aguerrido, atento, entregado, contragolpeando bien. Igual pudimos hacer un segundo gol para estar más tranquilos, pero lo importante era ganar.

-Es el portero con más paradas de Primera división y el segundo que más de las principales ligas europeas. Todo siendo el portero de un equipo que encaja mucho. ¿Qué sería del Granada sin Ochoa?

-Siempre he creído que cada uno lo tiene que hacer bien en su parcela para que el grupo se beneficie, para que seamos más fuertes. El camino es exigirse uno día a día, a pesar de las circunstancias y de los resultados cuando no acompañan. Tratar de estar por encima de estas situaciones y trabajar al máximo. Estas estadísticas hablan un poco de mi esfuerzo. Creo que he ido de menos a más, como en mi propia estancia en Granada. Estoy contento de estar aquí y ojalá todos los estemos cuando acabe la temporada, incluida la afición.

-¿Se están cumpliendo sus expectativas al menos en cuando a recuperar sensaciones de portero?

-Sabía que jugar domingo tras domingo dependía de mí, de lo que hiciera. Hay que confirmarlo siempre. Así lo demanda el fútbol. Mi intención era tener minutos, estar en un sitio en el que me hicieran sentir pieza fundamental de su estructura. Estoy agradecido con Granada, que me abrió sus puertas, y una vez aquí dependía de lo que diera, no iba a jugar por decreto. Intento aportar mi labor y también mi experiencia al resto de compañeros.

-El otro día, antes de empezar el partido con Las Palmas, hicieron un corro de jugadores en su campo y se vio que usted llevaba la voz cantante. ¿Qué les dijo?

-En momentos complicados, con lo que te rodea, al tener pocos partidos en Primera, te olvidas de que eres bueno. De que eres capaz de hacer las cosas, lograr jugar bien y ganar un partido. Les dije que dependía de nosotros, que somos once contra once y que no estábamos solos, que nos teníamos los unos a los otros para salir adelante. Que nuestras familias estaban ahí también. Que demostrando esto, la afición iba a estar apoyándonos. Afortunadamente fue así.

-Tuvo un comienzo extraño en la campaña. Siempre alguna buena parada pero también algún error puntual. ¿Le mermó la moral esto?

-Es como todo. Todo lleva un proceso, una adaptación. A veces es más rápida. En la posición de portero particularmente, puedes tener buenas actuaciones y un mero detalle erróneo es más visible que lo bueno. Sabía que mi puesto es así. Llevo tiempo en esta carrera. He vivido buenos y malos momentos, y lo importante es mantener el equilibrio emocional. Estar por encima de las situaciones. Es clave no perder el enfoque de lo que quieres, de adónde quieres llegar. Cuando ganas, viene otro partido complicado. Cuando pierdes, hay que apretar y trabajar. Lo bueno es bonito, pero no hay que creérselo. Y las malas a veces no lo son tanto. Yo he aprendido de la experiencia y trato de transmitir esa calma y esa seguridad a los demás.

-¿Se quitó una espinita con su partidazo ante el Málaga?
-No fue quitarme una espina, ni tengo nada contra ellos. Al contrario. De hecho, guardo mucho cariño por esa afición, por abrirme las puertas de España. Tengo un hijo nacido allí, la gente siempre me trató fenomenal... Tengo ese cariño, pero después viene el aspecto profesional. Fue bonito regresar a La Rosaleda y encontrarme con amigos y compañeros, que me recibieran bien. Me sentí cómodo y afortunadamente las cosas salieron bien para el Granada. El fútbol se queda ahí. Defiendo al Granada y quería lo mejor para esta camiseta. Hay que separar los sentimientos.

-Todo habría sido distinto con una temporada más tranquila en el equipo, ¿no?
-La intención era no sufrir como nos está pasando. Somos los primeros que querríamos estar mejor. Las cosas a veces no salen como nosotros pretendemos. Es comprensible que la afición se enfade y exija. No es que bajemos los brazos. A veces lo hemos intentado y no ha salido. Somos los primeros decepcionados con algunos resultados, que nos ponen tristes. Trabajamos día a día, fuerte, vemos vídeos, analizamos a los rivales, nuestros propios defectos, nos reunimos... No estamos esperando sólo al siguiente fin de semana. Buscamos la fórmula de salir de la racha negativa que llevábamos. Este triunfo nos viene bien porque ayuda en lo anímico, hace que vuelva la confianza de la grada, que nos hacía falta. Queríamos ofrecerles una satisfacción. Un reencuentro. Fue un triunfo, pero no hemos hecho nada. Aún falta un camino largo y tenemos que seguir apretando los dientes, con la afición con nosotros, pero exigiéndonos. Queremos que ellos estén contentos. Queremos quedarnos en Primera.

-No he encontrado a ningún empleado del club que hable mal de usted y eso que posiblemente es el futbolista más reconocible de la plantilla. No se le sube la fama la cabeza.

-Trato de ser como soy en mi casa, como me educaron y me inculcaron mis padres. Saludo y converso con todo el mundo. Comportarme como me gustaría que me trataran. Somos futbolistas, famosos, pero somos personas y todo el mundo es importante, cada cual en lo suyo. La gente me trata fenomenal e intento hacer lo mismo. Se siente el cariño.

-¿Qué porcentaje de importancia tiene el día a día, con el entrenador Roberto Navajas?

-Rober es una persona a la que le gusta sacar lo mejor de los porteros viendo los detalles pequeños. Las decisiones del portero son tan rápidas que a veces no se notan. Él es metódico, exprime cada ejercicio, de un tiro, de una estirada, de cómo coger el balón. Detalles que te hacen ganar segundos, estar más equilibrado para algún disparo. Le encanta su trabajo y se pasa horas analizando nuestros movimientos para potenciarnos y sacar nuestro mayor rendimiento.

-¿Cuál es su secreto en el 'mano a mano'?

-Cada portero tiene su estilo. Trato de mantener la estabilidad ante el delantero, para que dude hasta el final. Ponérselo difícil. Me funciona bien. A veces sale, otras no. Recuerdo una con Success, cuando vine a Los Cármenes el año pasado, que fue muy difícil, porque es muy potente, y me salió. Otras te la juegas y te ganan.

-¿Cómo van los trámites para obtener la nacionalidad española?

-Ya llevo el tiempo suficiente para conseguirla. Al comenzar el año tuve un examen, la última fase. Es cuestión de tiempo ahora. No te dicen cuánto, pero avanza.

-¿Estaría dispuesto a renovar por el Granada?

-Nunca se sabe. En la actualidad, ni yo sé que va a pasar conmigo en verano. Me gusta España, estoy muy contento aquí. En Granada me están tratando de manera excelente. Primero hay que buscar la salvación y luego me plantearé si seguimos. Pero no hay que adelantarse. Hay que ir paso a paso. Enfocarnos en lo importante, que son las finales que tenemos y buscar seguir sumando. Nos falta mucho. Soy feliz aquí.

-¿Qué ve en el mes de mayo, cuando acabe LaLiga?

-Van a ser unos meses intensos. Ojalá que sean de buenos resultados. Por las malas que hemos pasado, estamos más preparados mentalmente para salir de abajo que otros equipos. Si aprovechamos un par de victorias, vamos a salir más fortalecidos que los demás, después de todo lo que hemos sufrido.


«El mirador de San Nicolás en un atardecer es algo excepcional»

Ochoa descubre su lado más personal y familiar

R. L. | GRANADA

13 febrero 2017
02:35

-¿Qué hace en su tiempo libre?

-Estar con mis hijos. Voy al colegio a por ellos, juego en casa, hago algún show, les llevo al cine.

-¿Algún rincón que le haya seducido de Granada?

-El mirador de San Nicolás en un atardecer es algo excepcional, con la vista de la sierra con nieve.

-Tiene más de 2,4 millones de seguidores en Twitter.

-Mantengo mi vida privada separada, pero no impide que comparta cosas. Hay gente joven que quiere ser portero y creo que tengo la obligación de decirles que si lo sueñan y lo desean es posible. Yo fui un niño como ellos.

-¿Alguna superstición?

-Me persigno, hago tres veces la cruz. Llevo un poco de agua bendita que trajeron mi padre y mi mujer desde el Vaticano.

-¿Algún sitio en la ciudad donde se pueda comer verdadera comida mexicana?

-He ido a un par, pero hasta ahora, no. Te ponen burritos, que son más 'tex-mex'. La tortilla de los tacos no es la misma. Las salsas tampoco. Para quitarse el antojo, puede valer.

-¿Si me invita a su casa, qué me ofrece?

-Me gusta, en los días libres y si hace sol, preparar asados.

-La última película que vio.

-Ballerina. Antes, Trolls. Estoy perdido con películas de mayores. Manda mi hija.

-Y el último libro.

-Estoy con el de Ferguson, 'Liderazgo'. Y regalé el de Iniesta.

-Sea sincero. ¿Cómo se cuida ese pelo?

-Champú, acondicionador y listo. Nada más.